Ser adolescente siempre ha sido duro, pero la presión por estar delgado quizá nunca haya sido mayor. De hecho, aunque las tasas de obesidad adolescente han aumentado en los últimos 10 años, también lo ha hecho el número de adolescentes que dicen estar intentando perder peso. Esto ocurre en un momento en el que las redes sociales destacan periódicamente nuevos dietas de moda y elaborados programas de ejercicios que afirman ayudar a perder peso rápida y fácilmente. La verdad es que perder peso nunca es fácil, pero hay algunas formas seguras y saludables para que los adolescentes encuentren y mantengan un peso saludable.
DR. CHRISTOPHER MCGOWAN
El Dr. Christopher McGowan, líder en endobariatría, está especializado en tratamientos no quirúrgicos de la obesidad y cuenta con una triple titulación en Medicina Interna, Gastroenterología y Medicina de la Obesidad. Conocido por ser pionero en la gastroplastia endoscópica en manga (ESG), con más de 2.000 intervenciones, su influencia mundial y sus contribuciones a la investigación lo definen como un experto de primer orden.
¿Qué es un peso saludable para los adolescentes?
Aunque la pérdida de peso suele asociarse a la consecución de un físico deseable, la verdadera razón para que cualquiera dé prioridad a la pérdida de peso es la salud a largo plazo. En las últimas décadas, la investigación sigue demostrando la relación entre obesidad y afecciones como las cardiopatías, la diabetes de tipo 2, algunos tipos de cáncer y otras numerosas enfermedades y trastornos. Para los adolescentes, por tanto, la primera y más importante consideración es su salud y bienestar general y el impacto de su peso.
De hecho, el término "sobrepeso" se define realmente como el punto en el que el exceso de peso corporal empieza a afectar negativamente a la salud. Sin embargo, dado que este punto es único para cada persona, los profesionales sanitarios suelen evaluar la índice de masa corporal (IMC). Esta cifra se obtiene comparando la estatura y el peso de una persona; se considera que entre 18 y 24 normal, 25-29 es sobrepesoy 30 o más es obesos. Por ejemplo, si una persona de 1,70 m pesara 45 kg, tendría un IMC de 24,96 y probablemente tendría un ligero sobrepeso; si la misma persona perdiera 5 kg, su IMC bajaría a 23,3.
¿Cuáles son las causas del aumento de peso?
Una de las dificultades a la hora de establecer un peso saludable para un adolescente es el hecho de que algunos todavía están creciendo y, por lo tanto, siguen ganando peso corporal. Esto significa que un cierto aumento de peso es totalmente normal a medida que el niño avanza en la adolescencia. Sin embargo, es posible ganar una cantidad de peso poco saludable y, de hecho, el porcentaje de jóvenes de 12 a 19 años que se consideran obesos es ahora el más alto registrado (22,2%). Hay muchas causas posibles del aumento de peso, pero a continuación se indican algunos factores que pueden contribuir:
- Pubertad: Todos los adolescentes pasan por la pubertad, pero puede ser una experiencia muy diferente para cada persona. Para algunos (especialmente en los primeros años de la adolescencia), el aumento de peso puede ser consecuencia de cambios hormonales, pero para otros puede estar relacionado con un aumento del apetito.
- Condiciones sanitarias: Algunas enfermedades, como el hipotiroidismo, pueden provocar un aumento de peso sin necesidad de modificar la dieta. También hay algunos medicamentos que promueven el aumento de peso indirectamente a través de efectos secundarios.
- Psicología: La adolescencia es una época de desarrollo tanto emocional como físico, por lo que puede haber cualquier número de factores psicológicos que puedan conducir al aumento de peso. Muchos adolescentes sienten ansiedad y depresión importantes por una amplia variedad de razones, y ambas están relacionadas con comer en exceso.
- Dieta: Aunque la actividad metabólica tiende a ser mayor durante la adolescencia, sigue siendo muy fácil ingerir más calorías de las que se queman. Esto se ha vuelto aún más fácil con las interminables opciones de comida rápida y comida basura con alto contenido calórico que ahora están fácilmente disponibles. Además de los depósitos de grasa que contribuyen al aumento de peso corporal, estos alimentos pueden aumentar el colesterol y las probabilidades de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
- Actividad física: Al igual que muchos adultos, muchos adolescentes llevan un estilo de vida relativamente sedentario y no realizan mucha actividad física. Incluso al margen de entrenamientos específicos, mantenerse activo y moverse tiene su valor. La falta de ejercicio o de actividad física se asocia desde hace tiempo con el sobrepeso y la obesidad.
Principios de la pérdida de peso
El interés por la imagen corporal y por ser percibido como delgado se ha intensificado aparentemente en los últimos años, y esto es quizá aún más frecuente entre las adolescentes. La obsesión cultural por la delgadez puede llevar, y de hecho lleva con demasiada frecuencia, a las adolescentes a padecer trastornos alimentarios como la anorexia o la bulimia. Sin embargo, en lugar de fijarse en una dieta o un método de ejercicio específicos, he aquí algunos principios para perder peso que las adolescentes pueden incorporar a sus vidas de forma segura:
- Leer etiquetas: Una forma de adquirir el hábito de comer sano es ser más conscientes del contenido de los alimentos que ingerimos. Los alimentos envasados y procesados suelen tener ingredientes poco saludables o poco útiles que pueden aumentar la probabilidad de engordar o dificultar la pérdida de peso.
- Bebidas: Muchos de los refrescos, zumos y bebidas energéticas más comunes contienen una sorprendente cantidad de azúcar añadido. En su lugar, cambia las bebidas azucaradas por agua u otras opciones sin azúcar.
- Evitar la comida basura: Muchos de los alimentos más populares -helados, patatas fritas, frituras, etc.- tienen muchas calorías, grasas e hidratos de carbono; incluso los alimentos bajos en grasa suelen llevar azúcar o hidratos de carbono añadidos. Sustituye estos alimentos por tentempiés saludables como palitos de zanahoria, frutos secos, semillas o yogur.
- Duerma lo suficiente: Los adolescentes ya necesitan dormir más que los adultos, pero investigaciones recientes también han demostrado una relación entre el aumento de peso y no dormir lo suficiente. Los médicos recomiendan que los adolescentes duerman entre 8 y 10 horas de media cada noche.
- Fibra: Fibra alimentaria es importante para un sistema digestivo sano, pero también hay pruebas de que un alto contenido en fibra puede aumentar la sensación de saciedad, reducir la presión arterial y mejorar la respuesta del organismo a la insulina, todo lo cual puede contribuir a la pérdida de peso. La mejor manera de añadir fibra a una dieta sana es aumentar la cantidad de frutas, verduras y cereales integrales.
- Desplazarse: Tanto para perder peso como para la salud en general, es importante practicar una actividad física regular. Aunque puede resultar intimidante adentrarse en el mundo de los gimnasios y las ejercicioUn punto de partida puede ser simplemente levantarse y moverse más a menudo o dar un paseo corto. caminar.
- Hacerlo sostenible: Una de las partes más difíciles de la pérdida de peso es encontrar la manera de hacer pequeños cambios y progresos graduales. Cuando empezamos el proceso y nos sentimos decididos, es tentador añadir entrenamientos intensos y seguir dietas muy restrictivas. Pero a veces estos esfuerzos no son realmente sostenible y a veces puede dejarnos exhaustos demasiado pronto.
Conclusión
Los adolescentes de hoy en día están quizá más presionados que nunca para tener un físico que cumpla ciertos estándares. Sin embargo, en lugar de intentar cumplir estos estándares imposibles, los adolescentes deberían centrarse en encontrar hábitos saludables y un peso sano que promueva la salud a largo plazo. Para la mayoría de los adolescentes, esto significa hacer hincapié en la elección de alimentos saludables y en un aumento de la actividad física regular. En resumen: los planes de pérdida de peso para adolescentes pueden ser seguros y saludables cuando favorecen la salud y el bienestar general.